El Aeonium haworthii es una suculenta que desarrolla ramas largas coronadas por rosetas de hojas. Con los años, tiende a volverse leñosa en la base. La poda es necesaria para estimular nuevos brotes y conservar una forma equilibrada. Se recomienda realizarla en primavera, cortando los tallos más viejos o floridos. Deja algunos centímetros por debajo de la roseta al hacer el corte para facilitar el rebrote. Los fragmentos pueden replantarse fácilmente. Tras la poda, evita la exposición solar directa durante unos días. Este mantenimiento no solo mejora su aspecto, sino que también alarga la vida útil de la planta.
