Las manchas blancas pueden tener tres orígenes distintos: cal del agua, cochinilla algodonosa o mildiu. Si las manchas son secas y polvorientas, es cal: límpialas con un paño húmedo y usa agua destilada o de lluvia. Si las manchas parecen motas de algodón, se trata de cochinilla; elimínalas con un bastoncillo empapado en alcohol y aplica jabón potásico. Si las manchas son difusas y crecen rápidamente, puede tratarse de hongos; mejora la ventilación y aplica fungicida. Mantén las hojas limpias y evita pulverizar agua sobre ellas. Las manchas blancas no siempre son graves, pero si no se actúa a tiempo pueden extenderse y debilitar la planta.
Manchas blancas en suculentas: cal, hongos o plagas
