Los hongos aparecen cuando el ambiente es demasiado húmedo y sin ventilación. Para prevenirlos, esteriliza el sustrato antes de sembrar (horno a 100 °C o microondas 3 minutos). Usa agua destilada y añade una pizca de canela en polvo o carbón activo a la superficie del sustrato. Evita pulverizar en exceso y abre la tapa diariamente para ventilar. Si aparece moho, retira la capa superior y rocía con peróxido de hidrógeno diluido (10 %). Con aire fresco y humedad controlada, tus semillas germinarán sin riesgo de hongos.
Cómo evitar hongos durante la germinación de semillas de suculentas
