Los Aeonium forman tallos largos con rosetas al final. Cuando las hojas inferiores se secan o el tallo se alarga, corta el tallo principal dejando 5–8 cm. Deja secar el corte y replanta. Del tallo viejo brotarán nuevos hijuelos, creando una planta más densa. Los Aeonium agradecen la poda tras su periodo de floración, cuando comienzan a alargarse. Evita podar en verano, su etapa de reposo.
Poda en Aeonium: cómo mantener la roseta perfecta
